Aljarafe / ARQUEOLOGÍA
Tras tres años de trámites, el proyecto de dos emprendedores se topa con la Arqueología
E.F. / VALENCINA
DE LA CONCEPCIÓN
Día 25/03/2014 - 14.06h
Quieren construir una pista de «paintball» en una parcela privada que su familia tiene en Valencina de la Concepción
Los sueños de José Manuel y
Antonio, dos hermanos de Camas, están a punto de desmoronarse. Desde
hace casi tres años tienen un proyecto en la mente: crear unas
pistas de «paintball» en una parcela que su familia tiene en Valencina
de la Concepción.
Con ella quieren «labrarse un futuro profesional mejor» que les permita superar la precariedad y «sumar un atractivo turístico y de ocio» al municipio, como explican los jóvenes. Un negocio viable con el que atraer visitantes a la localidad.
Sin embargo, este proyecto ha chocado contra un muro difícil de mover: el de la Historia y la Arqueología. La parcela familiar de estos emprendedores se encuentra en un terreno rico en restos arqueológicos, con monumentos, como los dólmenes, de gran valor histórico, y con un paisaje de calidad asociado a la necrópolis prehistórica de esta zona del Aljarafe. Se trata de suelo no urbanizable «especialmente protegido» por el que se inscribe en el catálogo general del patrimonio histórico andaluz como Bien de Interés Cultural (BIC), con la tipología de Zona Arqueológica.
Con ella quieren «labrarse un futuro profesional mejor» que les permita superar la precariedad y «sumar un atractivo turístico y de ocio» al municipio, como explican los jóvenes. Un negocio viable con el que atraer visitantes a la localidad.
Sin embargo, este proyecto ha chocado contra un muro difícil de mover: el de la Historia y la Arqueología. La parcela familiar de estos emprendedores se encuentra en un terreno rico en restos arqueológicos, con monumentos, como los dólmenes, de gran valor histórico, y con un paisaje de calidad asociado a la necrópolis prehistórica de esta zona del Aljarafe. Se trata de suelo no urbanizable «especialmente protegido» por el que se inscribe en el catálogo general del patrimonio histórico andaluz como Bien de Interés Cultural (BIC), con la tipología de Zona Arqueológica.
Y no sólo eso. Esta parcela (de media
hectárea de superficie) está protegida por la estrategia territorial del Potaus,
como Zona de Protección Territorial, como Escarpes y Formas Singulares del
Relieve y como tal, en virtud del artículo 125 de la Normativa Municipal de
Protección del Paisaje en ella resulta inviable cualquier iniciativa de ese
tipo en esa parcela. El Ayuntamiento tiene en sus manos todas
estas normativa para no conceder la licencia al proyecto.
Argumentan asimismo desde el Consistorio
que el proyecto se ha trasladado a la Comisión Provincial de Urbanismo
de la Junta de Andalucía que, tras estudiarlo, ha emitido un informe
desfavorable. No obstante los emprendedores defienden que el Ayuntamiento remitió
un documento incompleto a este organismo y que, por ese motivo, no se aprobó.
Además esgrimen que no quieren levantar nada, «no se trata de construir, sino
de darle utilidad a una parcela que ahora mismo no tiene
ninguna».
Sea como fuere, lo cierto es que estos
jóvenes han estado 30 meses en un vía crucis de idas y venidas;
de peticiones de documentos, «siempre había que modificar algún punto», explica
uno de los hermanos; de propuestas insólitas, «llegaron a decirnos que
tendríamos que esperar a que se aprobara un nuevo PGOU»; o simplemente de
desplantes, «el alcalde nos ha dejado en varias ocasiones con la palabra en la
boca». Y eso que se trata de un proyecto de ocio a priori interesante para la
dinamización del turismo en la zona.
«Si nos hubieran dicho que no desde
primera hora, nos habríamos ahorrado todo este trabajo y muchos meses de
tensión», explica José Manuel. Pero después de casi tres años, tirar los sueños
por la borda cuesta.
Otras construcciones
Cabe recordar que en una zona cercana a
la parcela de estos jóvenes y muy cerca del Dólmen de la Pastora,
justo a la entrada de Valencina, se encuentra una gasolinera.
Sin embargo, el Ayuntamiento argumenta que ésta «se encuentra situada fuera de
la zona de máxima protección del paisaje y, además, su instalación es previa a
la declaración de Bien de Interés Cultural, y de las normas de protección
arqueológica publicadas en BOJA de 18 de enero de 2008».
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